Título: El Poder de la oración
Base Bíblica: Mateo 21:22
“Y todo lo que pidiereis en oración, creyendo, lo recibiréis.”
Introducción: La oración es hablar con Dios, pero no es un simple monologo donde el creyente habla al aire o en la soledad. Orar es hablar con Dios, porque Dios está presente, activo, oyendo y dispuesto a hablar a nuestros corazones. Debemos pues, orar conscientes de la presencia de Dios y aprender a guardar silencio para que él nos hable por su Santo Espíritu.
1. ¿Porque debemos orar?
· Para estar en comunión con nuestro Dios y disfrutar de su presencia. La biblia dice que en su presencia hay plenitud de gozo. (Sal 16:11)
· Para adorar y alabara Dios. (Jn 4:23-24)
· Somos seres espirituales y nuestro enemigo, el diablo, nos ataca para inducirnos a pecar y debemos orar para no entrar en tentación. (Marcos 14:37-38)
· Para interceder por nuestros familiares, la iglesia, por los que ministran la palabra de Dios, por nuestras amistades y por nuestra nación etc. (1 Ti 2:1-4; 2 Cr 7:14)
· Para pelear nuestras batallas espirituales y para ayudar a otros a pelear sus propias batallas ( 1 Ti 6:12; Ef 6:10-20
· Para presentar a Dios nuestras necesidades ( Fil 4:6,19)
2. ¿Cuándo debemos orar?
· En todo tiempo (Ef 6:18)
· Sin Cesar (1 Ts 5:17)
· Debemos tener una vida Devocional (Dn 6:10 Depende de la fe.
Juan 14:13 “Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo.”
Cuando oramos, debemos hacerlo en nombre de Jesucristo primeramente, luego tener la certeza que el Padre nos oye y sobre todo nos responde.
2. Es limitativo para los que permanecen en Cristo.
Juan 15:7 “Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho.”
Muchos de los creyentes cuando oramos a Dios, vemos que no recibimos lo que le pedimos pero debemos aprender que solo los que viven creyendo, obedeciendo y en comunión con Cristo podrán recibir lo que piden.
3. Para ser más eficaz, debe estar acompañado de alabanzas.
Hechos 16:25-26 “Pero a medianoche, orando Pablo y Silas, cantaban himnos a Dios; y los presos los oían. Entonces sobrevino de repente un gran terremoto, de tal manera que los cimientos de la cárcel se sacudían; y al instante se abrieron todas las puertas, y las cadenas de todos se soltaron.”
En este verso podemos ver que nuestra oración debe estar acompañada de alabanza para provocar que Dios muestre su poder ante cualquier adversidad por la que estemos pasando.
4. Manifestado en la vida de Elías.
Santiago 5:17-18 “Elías era hombre sujeto a pasiones semejantes a las nuestras, y oró fervientemente para que no lloviese, y no llovió sobre la tierra por tres años y seis meses. Y otra vez oró, y el cielo dio lluvia, y la tierra produjo su fruto.”
Ejemplos:
· Jacob: Génesis 32: 26-28
· Elías: 1 Reyes 17:21-22
· El Ladrón en la Cruz: Lucas 23: 48
· Los Primeros discípulos: Hechos 4:31