La traición y el perdón
Cuantas veces nos hemos sentido traicionados por alguien que queremos o conocemos. Esa traición es dolorosa porque pensamos que no éramos merecedores de tal acción o no esperábamos que esa persona(s) fuera capaz de hacernos daño. La Biblia nos presenta ejemplos de personas que fueron traicionadas por diferentes motivos. En el libro de Jueces 16:16-21 encontramos a Dalila que traiciono a Sansón al seducirlo y revelando a sus enemigos los filisteos el secreto de su fuerza. A Sansón le cortaron sus cabellos y le sacaron los ojos. Finalmente termino destruyendo el templo donde todos sus enemigos estaban reunidos junto con él.
En 2 Samuel 15:10-17 encontramos la historia del rey David que fue traicionado por su hijo Absalón quien le arrebató el reino de Hebrón, hasta que este ultimo murió. En 2 Reyes 9:14-27 nos habla acerca de la traición de Jehú al rey Joram a quien le dio muerte y ocupo su lugar. En 2 Reyes cuando los siervos traicionaron al rey Joás y le dieron muerte porque se había convertido en un rey muy malvado. Por último, uno de los doce discípulos Judas quien traiciono a Jesús entregándolo a cambio de 30 monedas de plata. En el libro de Génesis encontramos a José que fue vendido por sus hermanos, encarcelado en Egipto para luego convertirse en gobernador.
Todas estas personas tenían motivos para su traición. Ya sea la ambición de poder, riquezas, amenaza contra su vida o la de sus familiares, o por salvar a un pueblo de un rey malvado, estas personas cometieron traición para poder satisfacer sus intereses o de otros. Pero la Biblia también nos habla acerca del perdón y de amar a nuestros enemigos.
En Mateo 5:43-48, Jesús nos dice que debemos amar a nuestros enemigos, bendecir a los que nos maldicen, hacer bien a los que nos aborrecen y orad por los que nos ultrajan y persiguen. En Mateo 18:21-22, Jesús nos dice que debemos perdonar 70 veces 7. Cuando amamos, perdonamos. ¿Y si Dios es capaz de perdonar nuestros pecados, por qué nosotros no podemos hacer lo mismo? Si Dios perdono a un homicida como Moisés, un adultero y homicida como David, un desobediente como Jonás, un perseguidor como Pablo, ¿cómo nosotros no podemos también perdonar como Dios lo ha hecho?
Así que si alguien te ha hecho daño, te ha ofendido, te ha calumniado, te ha maltratado…ponlo en las manos de Dios que El no solamente sanará tu corazón, te dará paz, te protegerá y hará justicia. Las cosas obran para bien cuando dejamos a Dios que tenga el control de nuestras vidas. Amen
Fiorella Ruiz Chota 7 años
es verdad una traición y mentira duele pero con la ayuda de Dios se supera y se sigue adelante .